Probablemente, si nos hacemos
esta pregunta, aparezcan en nuestra mente muchas respuestas algo difusas: “esos
momentos en los que nos sentimos bien”, “no estar mal”, “lograr lo que queremos”,
etc.
El concepto de felicidad parece
muy esquivo y, aunque casi todos tenemos claro que es lo que más deseamos para
nosotros y nuestros seres queridos, no solemos tener muy claro en qué consiste.
La psicología se ha hecho cargo
de la necesidad de definir a esta y, apoyándose en lo que pensadores de
diferentes épocas ya habían planteado, en las últimas décadas han ofrecido
respuesta a esta cuestión.
En primer lugar, se habla de
bienestar humano; más de que de felicidad en sí misma. Este es dividido en
otras dos formas que a continuación se describen brevemente: bienestar
subjetivo o hedónico y bienestar psicológico o eudamónico.
El hedónico hace referencia al
ligado a la experimentación de placeres o, dicho de otra manera, equilibrio
entre emociones positivas y negativas. Se trataría pues, de esa felicidad que
“nos vende continuamente la publicidad”.
Dentro de este tipo de bienestar
también se incluye lo que se denomina satisfacción vital o valoración de “si la
vida merece la pena”.
El otro tipo de bienestar, el
eudamónico, estaría relacionado con la posesión y desarrollo de virtudes y los
valores en los que estas se sustentan. Por tanto, aquí no se trataría de la experimentación
de placeres, sino de vivir de manera coherente a estos.
Estos dos tipos de bienestar han
sido agrupados por Seligman (2011), uno de los autores más reconocidos en este
campo, en el modelo denominado PERMA, en inglés, PRISMA, en español (Tarragona,
2013). En resumen, este nos dice que el bienestar humano depende de estos
factores:
- P. Positividad o nivel aceptable de emociones positivas.
- R. Relaciones interpersonales.
- I. Involucrarse en aquello que conforma nuestra vida (trabajo, amigos, voluntariado, aficiones, etc.)
- S. Sentido de experiencia o nivel de propósito que le damos a nuestra vida.
- MA. Alcanzar metas relevantes.
SELIGMAN, M. E. (2011). Flourish: A
visionary new understanding of happiness and wellbeing. New York, NY, USA: Free Press. (Trad.
Esp. en Ediciones B: La vida que florece).
TARRAGONA, M. (2013). Psicología positiva y terapias
constructivas: una buena combinación. Terapia Psicológica.